12 de Octubre Día de la Hispanidad

En el día de la hispanidad se celebra el mayor genocidio de toda la historia. Se trata de no olvidar la destrucción de todo un Continente por “valerosos conquistadores” y con el apoyo entusiasta de la Iglesia.

Desembarcaron en lo que creían que eran las Indias, el primero que llego allí fue Colón, siguiendo los mapas seguramente provenientes de los Templarios, orden que debió tener comercio con América antes de ser destruida por el rey y el papa de la época, eso es otra historia.
Descubrimiento de América
El país llamado España acababa de construirse, para inaugurar la unión de Castilla y Aragón se procedió a expulsar a los judíos, no debía quedar ni uno, se convertían o pasaban a la hoguera de la inquisición, oportunamente introducida en España por los reyes católicos, también se utilizó contra los moriscos conversos, después de la toma de Granada sus tierras habían sido dadas a los nobles que ayudaron a la gloriosa reconquista, tierras que aún siguen en sus manos, después de despojarles de sus bienes se les hizo abandonar su religión y si tenían la sinvergonzoneria de rezar a su Dios para aliviar sus penas, la hoguera, siempre hambrienta, les esperaba.

Las airosas carabelas salieron de España siguiendo la ruta que marcó Colón, entre sus velas llevaban la muerte para millones de seres humanos que nunca comprenderían la atroz crueldad de las gentes que se les venían encima, quizás no lo han comprendido todavía.

Fray Bartolomé de las Casas, contó horrorizado lo que allí pasaba:
”Entraban los españoles en los poblados y no dejaban niños, ni viejos, ni mujeres preñadas que no desbarrigaran e hicieran pedazos, hacían apuestas sobre quien de una cuchillada abría a un indio por en medio o le contaba la cabeza de un tajo. Arrancaban a las criaturitas del pecho de sus madres y las lanzaban contra las piedras. A los hombres les cortaban las manos, a otros les amarraban con paja seca y los quemaban vivos, y les clavaban una estaca en la boca para que no se oyeran los gritos. Para mantener los perros amaestrados en matar, traían muchos indios en cadenas y los mordían y los destrozaban y tenían carnicería pública de carne humana. Yo soy testigo de todo esto y de otras maneras de crueldad”.

Bartolomé de Las Casas, aterrado de lo que allí pasaba buscaba para dar cuenta al emperador Carlos V ínclito rey de las Españas. Le siguió por toda Europa, el rey estaba muy ocupado en las guerras de religión contra los protestantes, que deseaban liberarse del yugo papista, en ellas gastaba todo el oro que los conquistadores robaban a todo un continente.

Cuando logró que se le recibiera el emperador le escuchó en silencio, habló Bartolomé de las barbaridades que había presenciado, de la exterminación anunciada y de la manera que tenían los españoles de agotar a los habitantes de aquellas regiones al hacerles trabajar sin descanso.

También le contaría como daban a comer a sus perros a los recién nacidos, así los padres no tenían que parar de trabajar para ocuparse de ellos. El rey no contestó, hablaba poco, quizás la enfermedad mental que le hizo mas tarde morir loco en Yuste empezaba ya a manifestarse.

Pronto se supo lo que el Emperador decidió, que se llevaran allí los negros esclavizados en África, los portugueses ya habían mostrado el camino iniciando la trata de negros, así empezó también otra tragedia para otro continente, el descubrimiento de América fue trágico para África y para toda la humanidad, que a pesar de las continuas guerras nunca había conocido crueldad semejante. Europa se desarrolló gracias al sufrimiento y la muerte de millones de indios y africanos.

Bartolomé no volvió a las Américas, andando los años consiguió, en lo que se llamó la Controversia de Valladolid, que la Iglesia aceptara la idea de que los nativos de América eran seres humanos y no animales, hermosa victoria, pero sobre todo para la Iglesia, puesto que tenían alma ya podía dedicarse a salvarla, y puso manos a la obra sin más tardar, la ocupación de todo un continente no hubiera sido posible sin la intervención de los curas que quemaban a los que no querían convertirse, que arrancaban a los hijos a sus padres para educarlos según sus creencias y ponerlos así al servicio de los invasores de su país, debían olvidar su cultura, su lengua, su familia y sus dioses.

Las poblaciones Mayas intentaron adaptarse a la Conquista, suponían que los invasores se marcharían por donde habían venido y les dejarían tranquilos, ya sabemos que no fue así. La cristianización fue encomendada a los franciscanos, se agrupó a los habitantes de los pueblos en grandes campos de concentración para mejor poder convertirlos y bautizarlos, después se llevaban a los niños para adoctrinarlos, los monjes estaban muy satisfechos de sus métodos hasta que descubrieron que en secreto, e incluso en las iglesias la población seguía adorando a sus dioses.

En Guatemala la exterminación de los nativos vino a causa del éxito del cacao, los españoles llegados allí para levantar fortunas vieron una ocasión de enriquecerse, las tierras se dedicaron al mono cultivo y los pobladores del país fueron obligados a trabajar hasta el agotamiento, sin poder cultivar otra cosa que cacao no tenían nada para comer y tampoco dinero para comprar en el comercio, el hambre los mató, un día el cultivo de la planta codiciada tuvo que ser abandonada falta de brazos.

En América del norte se extermino toda la población india para arrebatarles sus tierras, programando el hambre al privarles de su alimento básico, los famosos bisontes, y también distribuyendo bebidas alcohólicas que les enfermaban, e incluso distribuyendo mantas con el bacilo de la tuberculosis, pocos quedan hoy día.

Un caso similar se dio en la pampa Argentina, los habitantes fueron asesinados para poder utilizar sus tierras como pasto para los ganados. La famosa Tierra de Fuego quedó sin luz.

En Australia a los aborígenes se les cazó como animales, de ellos nadie se preocupo de averiguar si tenían alma, eran lo mismo que los canguros.

papa Benedicto XVIPapa Benedicto XVI sabio
Hace unos meses, durante su visita al Brasil, el papa Benedicto XVI, dijo a la multitud que le acompañaba que la Iglesia nunca había tratado de destrozar su cultura, sino que vino a llevarles el dios que todos ellos anhelaban.

Curiosas palabras, seguramente el papa infalible, no ha tenido tiempo de conocer la historia de todo un continente, parece creer que sus habitantes deseaban ardientemente ser explotados, torturados, asesinados y víctimas del Mayor Genocidio de la Historia, todo eso en nombre de su dios y de la Corona Española.

Hatuey: Prefería ir al infierno antes de volver a ver a un cristiano
Después de los terribles crímenes cometidos por los cristianos en Santo Domingo, el cacique Hatuey logra escapar y organiza la resistencia en la isla de Cuba. Perseguido y hecho prisionero, fue condenado a morir en la hoguera.

Atado fuertemente a un poste cuando las llamas comenzaron a chamuscarlo se le acercó un sacerdote para hacerlo cristiano antes de morir. Hatuey pregunto si haciéndose cristiano iría al cielo de los cristianos, y como el sacerdote le contestara afirmativamente, le dijo que prefería ir al infierno antes de volver a ver a un cristiano.

Así murió aquel valiente. Creo que hay muchos que pensamos que el peor infierno sería convivir toda la eternidad con los cristianos.

v o l v e r