¿Quiénes son los salvajes, Sr. Alan García?

Enviado por Nasario Mamani
Los Pueblos Indígenas de la Región Madre de Dios representados por la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes – FENAMAD se pronuncia ante la opinión pública nacional e internacional para aclarar las diferentes informaciones difundidas en los últimos días.

Salvajes en el PerúRepudiamos categóricamente los calificativos vertidos por el Sr. Alan García Pérez en los cuales se nos tildó de primitivos a los indígenas que participaron en el Paro Regional de Madre de Dios, e hizo alusión a la vigencia de la doctrina comunista en este contexto.

De un lado, no es difícil darse cuenta no solo del escaso conocimiento del presidente sobre la realidad de los pueblos indígenas, más aun, cuando durante su discurso de apertura de la Cumbre ALC-UE, afirmó que en América del Sur se hablaban solamente tres idiomas; sino que además, el presidente expresa a gritos sus prejuicios contra parte importante de la población del Perú: Los pueblos indígenas.

De otro lado, sus lamentos sobre la doctrina comunista no tienen absolutamente nada que ver con el pensamiento indígena, ajeno a esta doctrina surgida en un contexto totalmente foráneo al nuestro, sino que expresa sus propios miedos, sus propios fantasmas, con los que los pueblos indígenas no tenemos nada que ver.

Rechazamos las acusaciones difundidas en diversos medios de comunicación en donde se nos acusa y responsabiliza de ser autores del incendio del local institucional del Gobierno Regional.

Si bien hubo quienes informaron con toda objetividad y responsabilidad, contribuyendo al tratamiento serio de la situación; también hubo quienes hicieron afirmaciones tan irresponsables y que ameritarían denuncias por difamación, como “los indígenas incendiaron el local del Gobierno Regional de Puerto Maldonado por su descontento”.

Algunos también demostraban su pasión por las películas de ciencia ficción al afirmar que “los indígenas lanzaron flechas encendidas al Gobierno Regional”.

Los indígenas no incendiamos nada, nunca lo hemos hecho y nunca lo haremos porque no actuamos así y porque tenemos nuestros objetivos muy claros:

Buscamos el respeto de nuestros derechos, el respeto de nuestros territorios, no buscamos causar situaciones de salvajismo ni barbarie; lo cual si parece ser una expectativa del gobierno regional y nacional, con sus políticas contra el pueblo peruano, y también de los bandoleros que causaron la destrucción del local del Gobierno Regional.

Denunciamos las detenciones arbitrarias de hermanos indígenas, las cuales estuvieron plagadas de irregularidades, entre ellas: Los policías no contaban con una orden judicial para proceder al arresto, éstas se produjeron cuando el Paro ya había terminado; se persiguió a los indígenas como si fueran animales, se les golpeó brutalmente, se dispararon balas y cartuchos contra ellos, se les encadenó.

Luego, ya en la Comisaría de Puerto Maldonado, los policías golpearon salvajemente a varios de nuestros hermanos indígenas y los obligaron a declararse culpables. Durante la toma de la instructiva no hubo traductores de los idiomas Harakmbut, Matsiguenka, ni del Ese Eja.

Esto, sumado a los golpes, creó un ambiente de confusión, desmoralización, impotencia y pánico entre los indígenas, situación aprovechada por la policía para inculparlos.

Además, varios efectivos policiales encontraron en estas circunstancias el momento esperado para expresar sus prejuicios contra los indígenas, a quienes les decían frases como “nativo, me das asco” desahogando así frustraciones, complejos y traumas propios. Toda esta situación nos lleva a preguntarnos ¿Quiénes son los salvajes?

En horas de la madrugada del sábado 12 de julio, fueron liberados todos los hermanos indígenas que habían sido detenidos por la policía.

Sin embargo, el problema no termina aquí, sino más bien empieza, dado que todos están bajo orden de comparecencia, por lo cual, cada fin de mes tendrán que desplazarse desde sus comunidades, varias de ellas, a tres o cuatro días de distancia, por río, hacia Puerto Maldonado, para firmar una planilla en el Poder Judicial.

Informamos al Pueblo de Madre de Dios y de todo el Mundo que los presidentes de las organizaciones miembros de la Alianza de Federaciones de Madre de Dios, entre ellos Antonio Iviche, presidente de FENAMAD, están con orden de comparecencia aun cuando las mismas autoridades de Madre de Dios saben que no participaron ni idearon los condenables hechos de violencia producidos el 9 de julio, sino que, contrariamente, ese mismo día se pasaron varias horas con el Gobernador Departamental de Madre de Dios, acordando la intermediación del Sr. Pita para la instalación de una Mesa de Diálogo con el gobierno nacional, dando las garantías para la misma.

El día 10 en horas de la mañana se tuvo nuevamente una reunión con el Gobernador en la cual se firmó un Acta de Compromiso, dando una tregua, que dio lugar al levantamiento del Paro, con la información que el Ministro del Medio Ambiente encabezaría la Comisión que vendría de Lima para la instalación de la Mesa de Diálogo, la cual estaría llegando a Puerto Maldonado el día 11 de julio en horas de la mañana.

Por todo ello le preguntamos Sr. Alan Garcia
¿Quiénes son los salvajes señor presidente? Quienes expresamos nuestro rechazo a sus políticas que solo buscan la desaparición de manera progresiva de los Pueblos Indígenas, ya que nos ven como un estorbo ante sus objetivos y fórmulas neoliberales, las cuales dejarán en la extinción a nuestras presentes y futuras generaciones, por eso afirmamos que la aprobación de decretos legislativos atentatorios a los Pueblos
Indígenas son inconstitucionales, ilegales que vulneran y violan los derechos humanos, con tal de favorecer a los grupos de poder económico.

O quienes responden con bombas lacrimógenas, balas, agresión física, detenciones arbitrarias y el abrir procesos penales para callarnos. Mientras existan los pueblos indígenas seguirá vigente la defensa de nuestros derechos colectivos y territoriales.

Consejo Directivo de Federación Nativa del Río Madre de Dios Y Afluentes, FENAMAD

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