Cajamarca no se rinde, lucha con dignidad
    Cajamarca lucha por dignidad y no por 50 soles como lo hizo Newmont- Yanacocha en su paralización del 29 de mayo, coinciden los manifestantes. Si el gobierno Ollantista está apelando al cansancio de los cajamarquinos al no responder las justas demandas del pueblo, se equivoca totalmente, agregan.

José Heredia / regioncajamarca.gob.pe
Hasta el año 92 (1992), Cajamarca era famosa por tener una de las lagunas más preciosas del Perú, esa laguna se llamó Yanacocha. Así le escuché decir a un rondero bambamarquino, quien junto a miles de pobladores llegó a Cajamarca para sumarse al paro en contra del proyecto minero Conga que hoy cumple su décimo quinto día.

Cajamarca no se rinde carajo

Mientras la movilización continuaba por varias calles de la ciudad del Cumbe, sus compañeros lamentaban uno a uno cómo es que Cajamarca, después de casi 20 años de minería, siga sumida en la extrema pobreza y con altísimos índices de desnutrición y morbilidad.

La respuesta salta a la vista inmediatamente. “Yanacocha” es el nombre de una laguna que hasta el año 92 nos hacía sentir orgullosos de ser cajamarquinos; sin embargo, desde que un grupo de ambiciosos peruanos decidió unirse a la transaccional Newmont para explotar mineral en las alturas de Cajamarca y adoptó el nombre de esta laguna para su empresa; en 20 años se ha convertido en un nombre repudiable.

Las razones se han explicado hasta el cansancio, pero no está demás recordar algunas: La empresa minera no sólo destruyó aquella hermosa laguna que muchos jóvenes la conocen hoy sólo en fotografías, sino que, ha convertido al río Grande en un receptor de aguas tratadas que fluyen por 4 tubos y que aguas abajo sirven para uso doméstico de los cajamarquinos.

Otra cosa: ¿acaso una persona antes de salir a la calle y/o exponerse al sol, no primero usa un buen bloqueador para evitar que su rostro de queme? En el espacio hay tantos tóxicos que día a día van destruyendo la capa de ozono y no puede haber otra causa, sino, la de la empresa minera, porque otras actividades industriales que generen gran contaminación en la región, no existen.

Razones sobran para decirle que Newmont-Yanacocha está desligitimada en Cajamarca, y no sólo en el orden medioambiental que día día se contamina, sino por la soberbia de tratar a los cajamarquinos poco menos que ignorantes al entregar los mejores puestos de trabajo a los foráneos, que no estuviera mal, si es que fueran minoría; y con ello evitar que los cajamarquinos sólo se limiten a ganar el medio sueldo de las “aprovechadas services”, y en puestos que no superan a los de vigilancia, operadores de maquinaria pesada y voladura.

Por esto y mucho más el repudio a Yanacocha es unánime
Y lo encabeza un presidente regional como Gregorio Santos que sale a defender el agua y el medio ambiente en general con total valentía; pero básicamente se soporta en la experiencia vivida por 20 años.

La lucha de Cajamarca es digna y no obedece al pago de 50 soles como lo hizo Yanacocha en 29 de mayo pasado, de la mano con Lucho Guerrero, Emilio Horna y Jorge Vergara.

No a conga es un clamor que se va extendiendo a todas partes de la patria y el mundo. Ollanta Humala es consciente de ello, pero es incapaz de bajar al llano y aceptar que este proyecto de expansión es inviable por todas las actuaciones atroces de Newmont-Yanacocha.

Sin embargo, más conscientes que él son sus hermanos Pachacútec e Ima Sumac, y su papá Isaac Humala, quien ha dicho muchas veces que Conga es un cadáver y que su hijo no debe imponerlo a costa de balas.

Que así sea. Que Humala vuelva en sí, aunque parezca imposible; porque Cajamarca no se rinde carajo.

V o l v e r