Carta pública al Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Sr. Evo Morales Ayma
    LOS DDHH COMO OBSTACULIZADORES DE LA BUENA PREPARACION DE LOS SOLDADOS EN LAS FUERZAS ARMADAS

Excelentísimo Señor Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia:
Durante la clausura de la reunión de comandantes del Ejército, el 16 de febrero de 2012 en el Círculo de Oficiales del Ejército, zona Sur de La Paz, usted invitó a una discusión a los representantes de los organismos de Derechos Humanos diciendo que «por el tema de los Derechos Humanos nuestros soldados no van estar bien preparados físicamente».

Es con interés y mucha preocupación que aceptamos su invitación, porque lo que dijo ese día es una opinión común en el seno de las Fuerzas Armadas y también en la Policía. No es casual que bajo su gobierno los casos de tortura y de tratos crueles, inhumanos y degradantes de parte de las FFAA y de la Policía en contra de las personas sigan siendo una realidad cotidiana como en los gobiernos neoliberales anteriores.

Sin duda, una buena condición física es favorable al bienestar de las personas y el arte de un buen comandante es saber medir las fuerzas de su tropa. Pero, en el momento que cree que para manifestar su autoridad necesita humillar y ejercer violencia contra sus subalternos -como el maestro que pensaba que podía afirmar su autoridad y enseñar mejor golpeando a sus alumnos- está atacando los fundamentos de la dignidad humana.

Militares BolivianosTambién, en la mentalidad colonial el autoritarismo se ejerció practicando la violencia y la humillación juntamente con la justificación que golpeando se mejora al ser humano. Es paradójico, Sr. Presidente, que en su gobierno donde se habla tanto de descolonización, por otro lado se continúe a fortalecer esa mentalidad fomentando la cultura de abuso de poder y violencia de los órganos dichos de protección de las ciudadanas y los ciudadanos de nuestro país.

Incitar a los conscriptos a golpear, a «jaripear», a «chocolatear» a sus compañeros es formar mentalidades sádicas, fomentando el gusto» de maltratar a otro ser humano, destrozando así una educación familiar y escolar de respeto humano hacia sí mismo y hacia el otro.

El caso del subteniente Grover Poma, muerto a causa de los golpes de su instructor, visibiliza esta realidad peligrosa para cualquier proceso democrático.

Baltasar Garzón y Vicente Romero en su libro «El alma de los Verdugos», nos recuerdan que las dictaduras y los torturadores siempre se preparan en tiempos de democracia. Teniendo en cuenta que esto es parte de una política de Estado nos preguntamos ¿Qué tipo de ciudadano quiere formar el gobierno del Estado Plurinacional?

El Instituo de Terapia e Investigación sobre las Secuelas de la Tortura y la Violencia Estatal (ITEI), en sus 10 años de existencia ha estado enfrentado sin interrupción con las secuelas psicosociales a nivel individual como colectivo de la tortura y otras formas de violencia de Estado y también con personas quienes en cumplimiento del servicio militar sufrieron tortura y otros malos tratos.

Tenemos casos de personas afectadas que quedaron psíquicamente destrozados y a su turno destrozaron su entorno familiar desplazando la violencia sufrida y ejercida por las fuerzas del orden hacia sus seres más queridos.

Creemos, Sr. Presidente, que sería mucho más importante para nuestro país comenzar a cambiar esa cultura de violencia de las fuerzas del orden por una cultura de respeto de los derechos fundamentales de las personas, de las colectividades y de los pueblos. Un primer paso preventivo y fundamental es que el Estado Plurinacional se dote de una Ley contra la Tortura y cree el Mecanismo Nacional de Prevención que debía haber sido una realidad un año después que Bolivia ratificó el Protocolo Facultativo contra la Tortura en 2005.

El ante proyecto de ley contra la tortura y de creación del Mecanismo Nacional de Prevención que el ITEI elaboro en colaboración con organismos de Derechos Humanos nacionales e internacionales se encuentra entrepapelado en las Comisiones de Derechos Humanos de la Asamblea Plurinacional.

Expresando nuestra disposición para participar en el debate que Usted propuso, reciba Excelentísimo Señor Presidente del Estado Plurinacional nuestros saludos respetuosos.

V o l v e r