BOLIVIANAS homenajearon a la líder de la rebelión indígena

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Centenares de mujeres campesinas, indígenas y originarias de Bolivia homenajearon ayer a Bartolina Sisa, líder de la rebelión indígena, en cuyo honor cada 5 de septiembre se recuerda el Día Internacional de la Mujer Indígena.

Este día fue instituido por el Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América, realizado en Tiwanaku (Bolivia), en honor de Bartolina Sisa, guerrera aymara que se opuso a la dominación y la opresión de los conquistadores y fue asesinada por las fuerzas realistas españolas el 5 de octubre de 1782 en la Paz.

“Éste es un día que se recuerda en todo el mundo. Bartolina Sisa es una mujer valerosa que luchó no sólo por nuestro país, sino por todos los indígenas del Abya Yala (nombre dado al continente americano por el pueblo Kuna de Panamá y Colombia antes de la llegada de Cristóbal Colón y los españoles)”, expresó a Cambio la ejecutiva de la Federación Departamental de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de La Paz, Felipa Huanca.

La dirigenta reseñó con admiración que Bartolina Sisa, luego de ser apresada tras participar en el cerco a La Paz (1781) junto con su esposo Túpac Katari, fue arrastrada por los alrededores de lo que hoy es la plaza Murillo atada a la cola de un caballo, sentencia establecida por los opresores.

Dicha sentencia establece en su texto original, copiado del castellano antiguo, lo siguiente:

“A Bartolina Sisa Mujer del Feroz Julián Apaza o Túpac Katari, en pena ordinaria de Suplicio, y que sacada del Cuartel a la Plaza mayor por su circunferencia atada la cola de un Caballo, con una soga de esparto al Cuello, y Plumas, y una Aspa afianzada sobre un Bastón de palo en la mano y a voz de pregonero que publique sea conducida a la Horca, y se ponga pendiente de ella hasta que naturalmente muera”.

La presidenta de la Coordinadora Departamental para el Cambio de Cochabamba, Leonida Zurita, expresó:

“Bartolina Sisa es un orgullo nacional. Recordarla es valorar la importancia de la lucha de una mujer que murió por la liberación y mejores días para nuestra querida Bolivia”.

Ambas dirigentas bolivianas coincidieron en que la líder indígena es una de las principales impulsoras del proceso de cambio que hoy se vive en Bolivia.